¿Tu celular ya no da para más? Identifica cuándo es el momento ideal para venderlo y sacarle el mayor provecho antes de que pierda todo su valor. De acuerdo con el medio colombiano El Tiempo y otros blogs como Addictware, existen algunas señales a las que debes poner atención.
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La batería no aguanta ni medio día de uso normal.
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Cuando la salud de la batería cae por debajo del 80%, el rendimiento se ve severamente afectado. Apps como AccuBattery (Android) o el mismo reporte de iOS te dan el dato exacto. Una batería en mal estado no solo es una molestia, sino que reduce el valor de reventa porque el nuevo dueño sabe que tendrá que invertir en un reemplazo pronto.
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Las aplicaciones se traban constantemente y el sistema operativo va lento.
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Esto suele indicar que el procesador ya no da abasto con las nuevas versiones de las apps o que la memoria interna está al límite. Una restauración de fábrica puede ayudar temporalmente, pero si el problema persiste, es una señal de que el hardware está quedando obsoleto. Los compradores perciben esta lentitud de inmediato durante las pruebas.
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El fabricante ya no ofrece actualizaciones de seguridad.
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Un celular sin soporte es un riesgo. Por ejemplo, un Galaxy S10 ya no recibe actualizaciones de seguridad regulares de Samsung, y un iPhone 8 está cerca de quedar fuera del soporte de Apple. Esto hace que el dispositivo sea vulnerable a malware y reduce su valor de reventa a un segmento de mercado con mucho menor poder adquisitivo.
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El costo de una reparación supera el 50% de su valor actual.
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Si se te rompe la pantalla de un modelo que hoy vale $4,500 MXN y la reparación oficial cuesta $2,800 MXN, no tiene sentido económico repararlo. Es el momento perfecto para venderlo "en partes" o "para reparar" y usar ese dinero para uno nuevo/reacondicionado.
Si experimentas 2 o más de estas señales, quizá sea momento de empezar a cotizar tu equipo. No dejes que pase más tiempo y verifica si ya es momento de empezar a buscar un nuevo smartphone.